Un cerrajero experto sabe que se necesita mucha determinación y conocimientos cuando se trata de forzar cerraduras. Probablemente se necesita más que clavar una ganzúa dentro del hueco para abrir una cerradura. Los mejores instrumentos posibles y una estrategia exacta son la forma de explicar un problema de pernos. Algunas estrategias que se completan como consejos útiles para las cerraduras en el hogar son:
Valorar la salud de la cerradura.
Es indispensable inspeccionar el estado de la cerradura. Las cerraduras sucias son más difíciles de forzar. Las cerraduras viejas y sin usar son más problemáticas para cualquier cerrajero. Los tambores utilizan pasadores de longitudes dispares para asegurar que la cerradura no se abra sin la llave adecuada. Los vasos pueden desgastarse después de un tiempo. Esto afectará la forma en que se puede abrir una cerradura de manera efectiva.
Rastrillar la cerradura para abrirla.
El término rastrillar se refiere a los diferentes métodos de cerrajería usados para levantar el cerrojo. Un cerrajero puede usar grasa para deslizar ciertamente una ganzúa en el cerrojo. Siempre y en toda circunstancia se usa un dispositivo de presión para encajar firmemente el chavetero y siempre se muestrea una tensión ligera antes de procurar una técnica más compleja. Lo mejor es ejercer una ligera presión, ya que la tensión extrema puede hacer que los resortes de la cerradura se debiliten y la cerradura se vuelva rígida.
Limpiándola
En el caso de que el rastrillado no tenga éxito, adecentar la cerradura es otra alternativa. El frotamiento empuja el primer pasador y lo empuja hacia atrás sobre la mayor parte de los pasadores. Esta estrategia deja al usuario advertir qué pines se establecieron primero. Una vez más, una tensión ligera es mejor, mas una presión más fuerte puede funcionar si ninguno de los pasadores está ajustado. Un cerrajero puede probar un par de niveles diferentes de presión mientras sostiene la selección en áreas variables.
